EL
PRESIDENTE, MÁS POBRE!
Dino Cappelli
Montevideo
Actualizado viernes 25/05/2012 12:06 horas
Montevideo
Actualizado viernes 25/05/2012 12:06 horas
Vive en su chacra de las afueras de Montevideo, en Rincón
del Cerro, tal como había prometido. Lo rodea su esposa, la senadora Lucía
Topolansky, la inseparable perra Manuela –nada de raza, nada de abolengo
canino-, sus cultivos y mucho verde. Eligió para quedarse el lugar en el mundo
que encontró hace años y le atrapó.
Desde allí dona a fondos de ayuda social un 90% de su salario, establecido en
unos 12.500 dólares americanos. Cada mes, 'Pepe' Mujica recibe 250.000 pesos
por su tarea como Presidente del Uruguay y Comandante en Jefe, pero de allí
sólo rescata para su manutención mensual unos 20.000 pesos. El resto se
distribuye desde el Fondo Raúl Sendic, que administra su fuerza política, el
Movimiento de Participación Popular, que ayuda a emprendimientos productivos
hasta simples colaboraciones, y ONG que colaboran con viviendas. Dice a los
cuatro vientos que "con ese dinero me alcanza, y me tiene que alcanzar
porque hay otros uruguayos que viven con mucho menos".
Es el mismo que propone donar las jubilaciones
presidenciales –esas astronómicas cifras que permanecen cobrando los ex
presidentes constitucionales del país- y el mismo que utiliza un simple
Chevrolet Corsa como vehículo de transporte oficial. A muchos años de la moto
Vespa que utilizó para llegar al Parlamento a la salida de la dictadura, ya
ungido como diputado, Mujica ha mantenido su perfil. Más acicalado que en
épocas de proselitismo político, igualmente el protocolo es algo bien alejado
de sus intenciones habituales.
El último ejemplo lo ubicó en la ferretería del barrio Paso de la Arena, hacia donde fue para adquirir una tapa para inodoro. Compró lo que iba a comprar, y acto seguido aceptó una invitación informal de los jóvenes de la zona, nucleados en el humilde club de fútbol Huracán. Sin seguridad, sin eufemismos, Mujica brindó una sencilla charla de aliento a los futbolistas que participan en el torneo de la Segunda División Profesional... aferrado a la tapa del inodoro recién adquirida.
De repente un Volkswagen Fusca, celeste, muy bien conservado, llegó a estacionarse frente al gimnasio del club. De alpargatas, con equipo deportivo, el Presidente dedicó varios minutos a los jóvenes deportistas, y prometió mayor atención a la institución además de convenir en "comer un asadito si el club asciende a Primera". Se sacó fotos, aceptó fotos, concedió abrazos y se fue con el aplauso de todos, abrazado a su perra Manuela que a estas alturas del mandato ya entiende de absolutamente todos los temas.
Ya de regreso a su chacra –esa finca que a lo lejos es custodiada por efímeras fuerzas policiales aceptadas a regañadientes por el mandatario uruguayo- Mujica continúa con su día. Revisa la tierra, mientras declara su auto VW Fusca como único patrimonio, valorado en 1.945 dólares.
De acuerdo a la última declaración jurada que presentó a la Junta de Transparencia y Ética Pública, Mujica sólo es dueño de este coche, mientras la chacra figura a nombre de la primera dama y senadora Topolansky, la cual también dona parte de su salario. Sin cuentas bancarias, sin deudas, el hombre dice dormir tranquilo, y asegura que espera culminar su mandato para descansar, más tranquilo aún, en su chacra de Rincón del Cerro.
Via: cenopoesiadobrasil.blogspot.com.br
Postado por Jardeu Amorim
J.H. | 27 de junho de 2012 às 21:41
Parabéns pelo blog, parabéns pelo trabalho!